Nos acercamos al final de nuestro trayecto, y también nos alejamos un poco de la ladera de la sierra. Nos mezclaremos con carreteras y autopistas y nos adentraremos en campos más típicos de la meseta castellana. Aunque, en ningún momento, tendremos que perder la Cañada de vista, a pesar de los obstáculos.
Llegamos hasta la estación de ferrocarril de Otero de Herreros, que dejaremos a nuestra izquierda y, escoltados por el asfalto, hasta la Peña Cachada, que hace intersección con la vereda de La Campanilla. Punto final del tramo quince.
Nos hemos quedado a escasos metros de Los Ángeles de San Rafael, inicio del último tramo de este maravilloso paseo que realizaban nuestras ovejas por la Vera de la Sierra, tramo segoviano de la Cañada Real Soriana.